Expléndido día otoñal para no quedarse en casa y salir zumbando a pedalear, que es lo mejor que se puede hacer un Domingo por la mañana, lo mejor y de lo mas apasionante.
Plaza Alsina, 9 de la mañana y el termómetro marca 11º centígrados (que bueno es esto) y no los cero grados que habitualmente nos marca en estas fechas.
Por el sur aparecen Manoli y Gabi, por el naciente Salva, por poniente Jordi y en el centro de la plaza ya estaba Luis esperando esta conjunción de estos galácticos astros cicleros.
Salimos y ya nos encontramos a las bestias del otro lado, el topo verde, los señores de la velocidad y el desenfreno, todos de bién negro, negro, negro con algún topo verde (bueno el encuentro y el viaje conjunto hasta Hostalric estaba pactado el día anterior) y ya en Llinars empezamos las carrerillas.
Francesc Catalán tiene prisa y acelera la marcha, Petit Pierre y el 3º Lider van al relevo.
Palitroque individual directo al bolsillo de cada uno. Calleron en esta ocasión 2 de tortilla y una de fuet. Los peus serán para otro día de mas frío, hoy no toca tanta caloría.
Mas pum, pum y casi al final de Riells G&M aparecen bajando las montañas. Prometen esperar abajo, en el cruce de caminos, y así fué. Los cuatro para arriba y los cuatro para abajo y en el cruce ya somos seis.
Iniciamos regreso hacia Cardedeu.
Mas pum, pum y luego otra vez pum pum. Llegamos a Llinars y un par de ellos a repostar esta vez rubias. Llegamos a Cardedeu y otro par de ellos tambien a repostar en Quina Tapa, tambien calleron rubias especiales con almejas.
No hemos ganado ninguna batalla ciclera pero tampoco hemos perdido la guerra.
Lo que si le hemos ganado una partida al aburrimiento y al apalacamiento de una mañana de domingo.
Si quieres otro domingo te vienes.
Solo si eres libre como el viento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario